Edgardo Chávez es un emprendedor que siempre estuvo motivado por experimentar, tener imaginación y soñar. Apasionado por el ajedrez y el tenis el 2014 tuvo la idea de cambiaría su vida. Luego de que le regalaran un cargamento de pelotas de tenis usadas, debió echar a volar su imaginación para poder reciclarlas. Fue en este proceso que surgió otra idea: hacer un escobillón con las cuerdas de las raquetas y otros materiales reciclados, algo de lo cual no había registro hasta ese momento. 

“Todo ese proceso, sumado a las carencias económicas que tenía en ese momento, derivaron en la creación del primer escobillón en el mundo que se genera y se hace a través de cuerdas de raquetas de tenis. Es un escobillón cien por ciento sustentable, ya que las cuerdas están hechas de plástico de un solo uso, por lo tanto su contaminación es brutal”, nos cuenta Edgardo. 

Al igual que en el tenis, Segundo Saque es una segunda oportunidad de hacer las cosas. Cada producto que tú compras, es un producto que permite impactar en la vida de otra persona

Edgardo Chávez, fundador de Segundo Saque 

Sí bien su emprendimiento no tuvo mucho éxito en ese entonces, fue el inicio de algo más grande: Segundo Saque, un emprendimiento social que da una nueva oportunidad a residuos derivados del tenis y el pádel, creando diferentes productos sustentables. 

En sociedad con la cadena deportiva Decathlon y con distintas organizaciones sociales como Futuros para el Tenis, este emprendimiento ha reciclado más de 4 toneladas de caucho, donado 20 millones de pesos de sus utilidades y plantado 63 árboles, gracias a la fabricación de escobillones, trofeos, juguetes para mascotas y aislantes, entre otros productos.

“Al igual que en el tenis, Segundo Saque es una segunda oportunidad de hacer las cosas. Desde el primer día, hemos donado a diferentes fundaciones y organizaciones. Cada producto que tú compras en Segundo Saque, es un producto que permite impactar en la vida de otra persona”, cuenta Edgardo Chávez. 

Uno de los principales productos que realiza Segundo saque son los trofeos, los cuales también aplican un modelo social y de sustentabilidad. Por cada 30 trofeos vendidos realizan la plantación de un árbol en Población Santa Adriana, que tiene uno de los menores índice de áreas verdes del país. También tienen galardones especiales, como uno de color rosado que va en beneficio de una organización para personas con cáncer. 

Gracias a este modelo, Segundo Saque se transformó en la única empresa Latinoamericana en fabricar trofeos para el World Padel Tour, que es la liga mundial de pádel. 

“Todo ese ingreso que entró con los trofeos lo fuimos utilizando en desarrollar de manera industrial los productos como los escobillones para las municipalidades, los escobillones para canchas de tenis, los cepillos para limpiar calzado y así todo lo que tiene que ver con el tenis”, asegura Edgardo Chávez. 

Hoy en día, Segundo Saque cuenta con varios puntos de reciclaje en alianza con Decathlon, los cuales están ubicados en las tiendas y también en clubes de tenis. El desafío que se plantean ahora es seguir creciendo y también expandir este modelo a otros deportes. 

“Si bien el tenis y el pádel son nuestra especialidad, queremos llegar a otros deportes con trofeos con sentido. En Chile tienes dos opciones, si quieres comparar premios, hay un montón en todos lados, si quieres comprar trofeos sustentables y con sentido, tienen que llegar a nosotros”, concluye Edgardo.